Rayza Feliz
Estudio de Deloitte “Perspectiva de viajes y hospitalidad
de Estados Unidos para 2019” muestra un aumento de un 6% en las reservas de
hoteles y 5,2% en las de cruceros en un lapso de ocho años.
Viajes en altamar incrementan rápidamente debido a la
oferta de “experiencias especializadas” a los turistas.
La industria de actividades de destino está lista para
alcanzar los $183 mil millones en 2020 y los hoteles deben de prepararse para
hacer este tipo de ofertas.
Brechas en talento siguen siendo uno de los principales
retos de la industria turística; 1.139.000 vacantes no fueron ocupadas en
Estados Unidos durante 2018 por esta razón.
Hace diez años las aplicaciones de hoteles y aerolíneas
estaban apenas llegando al mercado, Instagram no existía y la mayoría de los
viajeros aún revisaba los periódicos y revistas para identificar la mejor
opción para disfrutar sus vacaciones. No obstante, hoy, en 2019, la forma de
hacer turismo y las preferencias de los viajeros son cada vez más exigentes;
como muestra de ello es su tendencia a buscar “experiencias especializadas” que
la industria hotelera y de cruceros les ha podido ofrecer en los últimos años.
El estudio de Deloitte Global “Perspectiva de viajes y
hospitalidad de Estados Unidos para 2019” señala que, de 2009 a 2017, las
reservas de hoteles en el país norteamericano crecieron en un 6%, mientras que
las reservas de cruceros aumentaron en un 5,2%, presentando un mayor auge que
industrias como las de aerolíneas, restaurantes y renta de vehículos.
En el primero de los casos, los hoteles han mantenido un
impulso sostenido después de la crisis financiera de 2008. En cifras, del 2009
al 2017, la industria pasó de generar $20 mil millones a $29 mil millones, sin
embargo, se prevé que para el 2019 los ingresos promedio por tarifas diarias,
disponibilidad de habitaciones y ocupación tendrán niveles menores que los de
2018.
En el estudio se hace énfasis que, teniendo en cuenta
este contexto, la creación de entornos hoteleros con la capacidad de capturar y
aprovechar los microdatos de los huéspedes es una gran tarea para integrar todo
en un mismo ecosistema.
Además, los comercios que ofrecen hospedaje deberán de
enfocarse en aprovechar las oportunidades de negocio. Por ejemplo, combinar
hospedajes privados con las amenidades que ofrecen los grandes hoteles y
viceversa, ofrecer experiencias de bienestar, y actividades al alcance de un
clic y a tiempo real.
En este último punto, cabe resaltar que la industria de
actividades de destino está lista para alcanzar los $183 mil millones en 2020,
por lo que representan una gran oportunidad para que los hoteles conecten a los
huéspedes con las “experiencias únicas” que estos buscan e impulsen así sus
ingresos.
En el caso de los cruceros el riesgo a una posible
recesión no se vislumbra aún. Por el contrario, las experiencias de nicho que
tienen capacidad de ofrecer, como recorrer largas distancias e interconectar
comunidades ofreciendo un grado de inmersión en estas hacen que la industria se
proyecte como una de las preferidas por los turistas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario