Nelmary Salazar / GV
La industria farmacéutica en Nueva Esparta inició el 2017
con cifras rojas, debido a que 16 establecimientos han cerrado sus puertas,
producto de las fallas de materia prima en los laboratorios, así lo afirmó el
representante del gremio, Rafael Silva.
Confirmó que alrededor de una docena de esos
establecimientos están a punto de bajar sus santamarías, por las dificultades
que enfrenta la industria farmacéutica nacional, esto sumado a que los
despachos se han reducido a uno cada 15 días, después de haber sido al menos
uno diario.
"No solamente que cierren esos pequeños negocios,
empresas familiares muy pequeñas, sino que la ciudadanía está quedando
desasistida".
Silva apuntó que la situación del sector se agrava aún
más por "la inflación que se ubicó alrededor del 1000%, lo que ha generado
disminución en los márgenes de ganancias entre 5 y 6%, obligando a los
microempresarios del ramo a obtener pérdidas", detalló.
“No vemos ninguna
respuesta efectiva por parte del estado, salvo el anuncio de importaciones
masivas de productos que no sabemos de dónde vienen por instituciones que no
sabemos cuáles son”
El representante del gremio farmacéutico resaltó,
finalmente, que gran parte de los microempresarios del ramo han optado por
alternativas como vender víveres y otros productos para tratar de "sortear
las dificultades y no cerrar sus negocios".
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