La Procuraduría General de la República realizó ayer un descenso en el Departamento de Cajas de Seguridad, una filial de la empresa Dominican Watchman, donde se abrió una caja que contiene evidencias del caso que envuelve a oficiales y fiscales que actuaron en el robo de la droga de la Dirección Central Antinarcóticos de la Policía.
La información la ofreció el Procurador Adjunto Bolívar Sánchez, quien reveló que los dueños tendrán que aclarar lo encontrado en la misma.
El allanamiento se inició a las nueve de la mañana, y concluyó a las dos y 15 de la tarde, y se vio salir al también Procurador Adjunto Germán Villalona y varios ayudantes con un bulto, al parecer con papeles.
Sánchez definió el caso como “extremadamente complejo”, y aclaró que las investigaciones van en cuatro lados, uno el decomiso de la droga, otro la desaparición, y dos tumbes.
Sin embargo, el magistrado Sánchez no explicó en qué consisten los dos tumbes que dijo se investigan.
Los Procuradores Adjuntos, Bolívar Sánchez, Germán Villalona y el general de la Policía, Manuel Pichardo Reynoso, de Asuntos Internos, llegaron al lugar ubicado en la Plaza Comercial Kennedy a las nueve de la mañana y se retiraron pasada las dos de la tarde.
El caso ya lleva cerca de un mes que la Procuraduría General de la República se hizo cargo y todavía no ha podido dar datalles concreto de los responsables de la pérdida de la droga.
Ayer, el Procurador Adjunto del Departamento Antilavados, Germán Villalona no ofreció detalles, y reiteró que es al titular Francisco Domínguez Brito a quien le toca hablar del tema. Carlos Jiménez, abogado de Dominican Watchman, aclaró que el allanamiento fue a una caja de seguridad de un particular, no a dicha empresa.
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