El Cañero

20 de enero de 2015

Obama ultima discurso Estado de la Unión con Cuba de protagonista

Será la primera vez que se dirija al Congreso con mayoría republicana desde que llegó a la Casa Blanca.
Agencia EFE
El presidente de EE.UU., Barack Obama, ultima hoy los detalles del discurso del Estado de la Unión que ofrecerá mañana en el Capitolio, una declaración de intenciones para este año en el que subrayará la recuperación económica, la necesidad de una reforma migratoria o el recién estrenado aperturismo hacia Cuba.
Tras las elecciones legislativas del pasado noviembre, será la primera vez que se dirija al Congreso con una mayoría republicana en las dos cámaras desde que llegó a la Casa Blanca, y su séptimo y penúltimo discurso del Estado de la Unión.
Al contrario que en otras ocasiones, consciente de la oposición a la que se enfrenta entre los legisladores y de la necesidad de cambiar de dinámica política, el mandatario ha preferido desvelar las líneas maestras de su alocución en las últimas semanas a través de una gira que le ha llevado a diversos puntos del país.
Aupado por una serie de datos económicos muy positivos y por una mejora de su aprobación ciudadana, Obama declarará ante los congresistas el "resurgimiento" de la economía estadounidense como un hecho consumado, aunque aún enfrente retos.
El mayor de ellos, según explicará a los legisladores, será extender esa sensación de "recuperación" dentro de la clase media y fortalecerla, redoblando los esfuerzos, impulsando los salarios y la movilidad laboral.
En su primer viaje tras las vacaciones navideñas, Obama anunció en Phoenix (Arizona) que la Administración de Vivienda Federal recortará las tasas de seguros del 1,35% al 0,85%, lo que según sus cálculos supondrá un ahorro anual a unos dos millones de estadounidenses de 900 dólares si compran casas o refinancian sus hipotecas.
Así mismo, el presidente abordará la tan esperada reforma fiscal con la que pretende aliviar a las familias de clase de media e incrementar la carga impositiva a las rentas más altas, por lo que aquellos ingresen más de medio millón de dólares, verán subir sus impuestos del 23,5 % al 28.
Su propuesta elevaría los ingresos de los estadounidenses a las arcas públicas en 320.000 millones de dólares provenientes de los más ricos y las empresas en diez años, mientras que reduciría la recaudación a la clase media en 175.000 millones de dólares.
Además de abordar mejoras en materia de ciberseguridad, ofrecer dos años de educación superior gratuita en los denominados "colegios comunitarios", o abaratar y mejorar el acceso a Internet, Obama también se dirigirá a los congresistas hablar de su nueva postura hacia La Habana.
Precisamente esta semana, partirá la primera delegación oficial del Departamento de Estado para comenzar las negociaciones con el Gobierno de Raúl Castro, un acercamiento a la isla sobre el que también encuentra una férrea oposición entre los legisladores.
A este respecto, contará con la presencia como invitado del ex contratista estadounidense Alan Gross, encarcelado por Cuba durante cinco años y liberado recientemente a la luz de las negociaciones.
 Además del histórico giro de su Gobierno para acabar con el embargo a Cuba, Obama insistirá también a los legisladores sobre la necesidad de trabajar en el sistema migratorio del país desde el Congreso, que ha sido incapaz de aprobar una reforma migratoria integral en los últimos dos años.
A raíz de esa falta de consenso en los pasillos del Capitolio, el mandatario decidió actuar de manera unilateral el pasado noviembre hasta donde alcanzase su capacidad ejecutiva, unas medidas que evitarán la deportación de unos cinco millones de indocumentados pero que también le están trayendo duros enfrentamientos con los conservadores.
La reducción de gases metano y el cambio climático, junto a nuevas propuestas para la financiación de infraestructuras, serán otros de los aspectos que Obama tocará en su alocución, sobre la que lleva semanas trabajando su director de discursos, Cody Keenan.

La intervención, prevista para las 9 de la noche hora local (02:00 GMT del miércoles), es probablemente la mejor oportunidad para el mandatario de ser escuchado por los ciudadanos estadounidenses, ya que se trata de uno de los eventos políticos que recoge mayores índices de audiencia.

No hay comentarios: