Archivo del blog html

6 de mayo de 2025

Deportada de Florida a Cuba, esta madre vio cómo le arrebataban a su hija estadounidense de 17 meses y su sueño americano

Por Patrick Oppmann  CNN

En una casa destartalada de las afueras de La Habana, Heidy Sánchez muestra fotos de una vida pasada.

En su iPhone conserva imágenes de visitas a Sea World con su marido y su hija de 17 meses y de la pareja disfrazada de Papá Noel para Navidad.

“No sé si era el sueño americano”, dijo Sánchez. “Pero era mi sueño, mi familia”.

Ese sueño y esa familia fueron arrebatados a finales de abril cuando Sánchez fue deportada de Florida a su Cuba natal, a pesar de que tanto su hija como su esposo son ciudadanos estadounidenses.

Sánchez cruzó a Estados Unidos desde México en 2019 cuando la primera administración de Trump exigió que los solicitantes de asilo esperaran al otro lado de la frontera para las citas de inmigración como parte del programa “Permanecer en México”.

Autobuses operados por el Grupo GEO salen del Aeropuerto Internacional del Condado de King después de trasladar a los detenidos desde y hacia un avión fletado por ICE el 15 de abril de 2025 en Seattle, Washington.

Pero Claudia dijo que las amenazas de los cárteles, que suelen secuestrar y extorsionar a cubanos, le impidieron acudir a su cita. Cuando finalmente cruzó la frontera, les dijo a los agentes de inmigración que su vida corría peligro en México y le permitieron quedarse. Tras nueve meses bajo custodia de inmigración, fue liberada y pudo reunirse con su familia en Tampa.

Allí estudió para ser asistente de enfermería, conoció a su esposo, un ciudadano estadounidense naturalizado también de Cuba, y después de varios tratamientos de fertilización in vitro (FIV), finalmente realizó su sueño de ser mamá.

Sánchez sostiene que ella no encaja en el estereotipo de los peligrosos inmigrantes indocumentados que la administración Trump dice estar eliminando de las calles de Estados Unidos.

“Nunca tuve ni siquiera una multa”, dijo.

Aun así, con la audiencia de inmigración que se perdió en 2019 y la cambiante suerte política de los inmigrantes cubanos que anteriormente tenían la residencia en Estados Unidos prácticamente garantizada, el tiempo de Sánchez en ese país se estaba agotando.

En abril, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) se comunicó con Sánchez para informarle que una cita que tenía con los agentes se iba programar para el día siguiente. Aun así, sus abogados le dijeron que probablemente se trataba de una cita de rutina. En cambio, cuando se presentó con su hija Kailyn y un abogado, los agentes de ICE le informaron que quedaba detenida y que entregara a su hija a sus familiares.

“Llama al padre para que venga a buscarla, tú te quedas aquí”, dijo Sánchez que le informaron los agentes.

En un comunicado, el Departamento de Seguridad Nacional negó las versiones de Sánchez y su abogado de que no le dieron la opción de llevarse a su hija con ella.

“Nos tomamos muy en serio nuestra responsabilidad de proteger a los niños y seguiremos trabajando con las fuerzas del orden federales para garantizar que estén seguros y protegidos”, dijo la subsecretaria del DHS, Tricia McLaughlin.

“La administración Trump está dando a los padres que están en este país ilegalmente la oportunidad de autodeportarse y tomar el control de su proceso de salida con la capacidad potencial de regresar de la manera legal y correcta y volver a vivir el sueño americano”, continuó el comunicado.

No hay comentarios: