Dr. Herman Pilier Báez
Médico-Periodista
Desde el primer instante supe que TelexFree
era una estafa, sin embargo fui respetuoso con los que se arriesgaron a invertir
su dinero. Cada persona que me visitó, lo atendí lo mejor que pude.
A menos de un mes, ya me he enterado que seis
personas se han quitado la vida Post- Trauma de su inversión irrecuperable,
esta suma podría elevarse más en los próximos
días.
Recientemente me enteré que un amigo
motoconcho había tomado $62,000 pesos prestado a altos intereses para entrar a
la moda del negocio. Supe por otro amigo que ahora está muy deprimido.
Conozco gente que hipotecaron su casa, su vehículo,
sus prendas... para entrar a esta negra aventura. Resulta muy penoso saber que
un mecánico venda su taller, que era patrimonio familiar, para poner en riesgo
la comida de su familia.
Me dolió mucho, ver a un señor parado con un
machete frente la casa de un vecino suyo reclamando $300,000 que había
invertido.
Mucha gente que ni siquiera sabe agarrar un teléfono,
se involucró en el negocio. ¿Qué busca un motoconcho metido en un negocio de sabios?
¿Cómo es posible que la gente invierta tanto
dinero en un negocio que viola el "primer principio del dinero": Que
tenga regreso garantizado?
Lamentable, que muchos se atrevieran a
decirle a la gente, que ellos eran responsables de cualquier cosa que pudiera
pasar con su inversión. Esos que se extendieron tanto, ahora tienen más
problema, o sea, la quiebra de TelexFree no termina ahí, ahora vienen las
secuelas de la crisis. Lo peor no ha pasado todavía, ahora viene la depresión,
los cobros de hipotecas, las enfermedades, etc.
Ojalá que se entienda, que la vida no termina
ahí... y que aunque todo parezca perdido, siempre hay salidas viables.
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