Por RAF CASERT
"La UE actuará para salvaguardar sus intereses
económicos", dijo von der Leyen en un comunicado en reacción a la
imposición de aranceles al acero y al aluminio por parte del presidente de
Estados Unidos, Donald Trump, el día anterior.
"Los aranceles son impuestos, malos para las
empresas, peores para los consumidores", dijo von der Leyen. "Los
aranceles injustificados a la UE no quedarán sin respuesta, sino que
desencadenarán contramedidas firmes y proporcionadas".
Al igual que Trump impuso aranceles similares durante su
primera presidencia, las contramedidas de la UE podrían equivaler fácilmente a
las que se utilizaron para tomar represalias entonces si las medidas entran en
vigor el 12 de marzo.
Bernd Lange, presidente de la comisión de comercio del
Parlamento Europeo, advirtió que las medidas comerciales anteriores solo
estaban suspendidas y que legalmente podrían reactivarse fácilmente.
"Cuando comience de nuevo ahora, entonces, por
supuesto, restableceremos inmediatamente nuestras contramedidas", dijo
Lange a la radio alemana rbb24.
México y la UE renuevan acuerdo comercial días antes de
que Trump asuma el cargo con amenaza de aranceles
"Motocicletas, jeans, mantequilla de maní, bourbon,
whisky y toda una gama de productos que, por supuesto, también afectan a los
exportadores estadounidenses" serían atacados, agregó.
La Comisión Europea, que negocia las relaciones
comerciales en nombre del bloque, dijo que no está claro qué contramedidas se
aplicarían, pero funcionarios y observadores han dicho que apuntarían a los
estados republicanos y a las exportaciones tradicionalmente fuertes de Estados
Unidos.
En Alemania, que es la economía más grande de la UE, el
canciller Olaf Scholz dijo al Parlamento que "si Estados Unidos no nos
deja otra opción, entonces la Unión Europea reaccionará unida", y agregó:
"En última instancia, las guerras comerciales siempre cuestan prosperidad
a ambas partes".
Trump está golpeando al acero y al aluminio extranjeros
con un impuesto del 25% con la esperanza de que les den a los productores
locales un alivio de la intensa competencia global, permitiéndoles cobrar
precios más altos.
El vicepresidente de la Comisión Europea, Maroš Šefčovič,
dijo el martes que los aranceles son "económicamente contraproducentes,
especialmente dadas las cadenas de producción profundamente integradas
establecidas a través de nuestros extensos lazos transatlánticos de comercio e
inversión".
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