Un informe oficial de esa dependencia reporta que entre enero y marzo las registradoras aduanales enfrentaron una disminución de ingresos de casi tres mil 100 millones de pesos (más de 87 millones de dólares).
El informe oficial admite caídas en los ingresos de más de mil millones de pesos en enero y de una cifra similar en febrero, aguda si se toma en cuenta que ese es el mes más corto del año.
Para marzo la baja fue de 741 millones de pesos, menos crítica, pero también alarmante si se toma en cuenta que la picada se mantiene y, ahora, se combina con otros factores combustibles.
En efecto, desde comienzos de año han ocurrido varios cierres de empresas de zonas francas, una de las principales fuentes de ingreso de la economía dominicana junto a las remesas de sus comunidades en el exterior y el turismo.
La baja en los haberes por gravámenes fiscales adquiere asimismo un carácter político si se ubican dentro del complejo panorama dominicano, signado por una ola de protestas populares en demanda de mejoras sociales y salariales.
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