Por KEVIN FREKING
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Green estuvo acompañado en el pozo de la Cámara de
Representantes por más de 20 compañeros demócratas mientras el presidente de la
Cámara de Representantes, Mike Johnson, republicano por Luisiana, leía la
resolución de censura. Green y algunos de sus colegas comenzaron a cantar
"We Shall Overcome", un himno del Movimiento por los Derechos
Civiles, mientras Johnson hablaba. Los republicanos en la cámara gritaron
"orden" mientras continuaba el canto. Finalmente, Johnson declaró a
la Cámara en receso.
La resolución contra Green fue aprobada en una votación
mayoritariamente partidista de 224-198. Diez demócratas votaron a favor; ningún
republicano votó en contra.
Johnson retiró a Green de la cámara durante los primeros
momentos del discurso de Trump el martes por la noche. Green se puso de pie y
le gritó a Trump después de que el presidente republicano dijera que las
elecciones del 5 de noviembre habían entregado un mandato de gobierno no visto
en muchas décadas.
"Usted no tiene mandato", dijo el legislador de
Houston, agitando un bastón y rechazando una orden de Johnson de "¡tomar
asiento, señor!".
Los republicanos actuaron rápidamente para reprender a Green con una resolución de censura que registra oficialmente la profunda desaprobación de la Cámara de Representantes a la conducta de un miembro.
También hubo animadas discusiones entre un puñado de
partidarios de Green y republicanos después de la votación. El representante
Dan Meuser, republicano por Pensilvania, dijo que los demócratas estaban
molestos porque creen que las reglas de decoro en la cámara no se están
aplicando por igual.
La representante Ayanna Pressley, demócrata de
Massachusetts, confirmó el tenor del intercambio.
"En términos de reglas de decoro, a menudo son
violadas por nuestros colegas republicanos y la respuesta no es punitiva",
dijo Pressley.
El representante Dan Newhouse, patrocinador de la
resolución, dijo que el esfuerzo de censura era un "paso necesario, pero
difícil".
"Esta resolución se ofrece con toda seriedad, algo
que creo que debemos hacer para llegar al siguiente nivel de conducta en esta
sagrada cámara", dijo Newhouse, republicano por Washington.
Es la última consecuencia del comportamiento bullicioso
que ha ocurrido durante los discursos presidenciales más recientes ante el
Congreso. Los arrebatos de los legisladores han ocurrido en ambos lados del
pasillo político.
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