Santiago.- La familia de Fátima Guzmán,
reconocida dirigente política del distrito municipal de la Guáyiga, del
municipio de Pedro Brand y que fue asesinada por su esposo la madrugada del
viernes, ha estado marcada por tragedias de las que aún no se recuperan.
Aunque sus familiares cercanos residen en
Santiago, son nativos del municipio de Guayubín, provincia de Montecristi.
Un hermano de Fátima, identificado como
Rafelo Guzmán, fue asesinado en Santiago por un hombre supuestamente celoso,
que convivía con su ex pareja. El hecho ocurrió hace unos cuatro años, según
informaron amigos de ella.
Mientras que otro hermano de ella,
identificado como Carlos Guzmán, sufrió un accidente en una motocicleta en la
autopista Joaquín Balaguer de Santiago, en el que fallecieron sus dos niños y
él sobrevivió de milagro.
Fátima recibió varios disparos hechos por su
esposo la madrugada del viernes, cuando se encontraba durmiendo junto a una
hija de 15 años. La pareja había procreado otro hijo, de 17 años de edad.
Luego del hecho el hombre, identificado
como Florentino (Humberto) Bussi de
Jesús, se hizo un disparo en la mandíbula que lo mantiene en estado delicado en
el hospital Darío Contreras.
La comunidad de La Guáyiga, en Pedro Brand,
donde vivía la familia, se mostró consternada con el hecho, debido a que nunca
habían escuchado a la pareja pelearse.
Los restos de Fátima fueron sepultados al
mediodía del sábado en el sector Parada 7, en el Ingenio Abajo, Santiago, en
medio del dolor de familiares y amigos.
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