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21 de abril de 2025

Muerte del Papa Francisco


 El papa Francisco falleció el 21 de abril de 2025 a los 88 años en su residencia del Vaticano. Su estado de salud había sido delicado en las últimas semanas, y su última aparición pública fue el Domingo de Pascua, cuando saludó a los fieles desde el balcón de la Basílica de San Pedro.

El anuncio oficial de su fallecimiento lo hizo el cardenal Kevin Farrell, camarlengo del Vaticano, quien expresó que el pontífice había "retornado a la casa del Padre".

Tras su muerte, se activó el protocolo de Sede Vacante, y el Colegio Cardenalicio deberá reunirse en un cónclave para elegir a su sucesor.

Francisco, nacido como Jorge Mario Bergoglio, fue el primer papa latinoamericano y jesuita en la historia de la Iglesia Católica.

Su pontificado estuvo marcado por reformas, un enfoque en la justicia social y una fuerte defensa del medio ambiente.

El papa Francisco tuvo una relación cercana con la República Dominicana, aunque nunca llegó a visitar el país. Su interés por la región se reflejó en varios momentos clave:

En mayo del 2024, el papa recibió al presidente dominicano en el Vaticano. Durante la reunión, hablaron sobre temas como la migración, la educación y el papel de la Iglesia en la sociedad dominicana. Abinader incluso extendió una invitación para que el pontífice visitara el país, aunque la visita nunca se concretó.

En varias ocasiones, Francisco expresó su apoyo a la nación, especialmente tras desastres naturales como el huracán Fiona en 2022. También mostró preocupación por la situación en Haití y llamó a la comunidad internacional a ayudar a la nación vecina.

En su última Semana Santa, el papa recordó a las víctimas del colapso de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, enviando un mensaje de condolencias y oración por los afectados.

A pesar de no haber visitado el país, su influencia y mensajes dejaron una huella en la comunidad católica dominicana.

La última Semana Santa del papa Francisco estuvo marcada por su delicado estado de salud. Aunque había sido dado de alta tras una neumonía bilateral, su participación en las celebraciones fue limitada.

El Jueves Santo, mantuvo su tradición de visitar la cárcel Regina Coeli en Roma, donde compartió con los reclusos y les dirigió palabras de esperanza.

El Viernes Santo, no pudo presidir el Vía Crucis en el Coliseo, pero envió un mensaje que fue leído por un representante del Vaticano.

Mientras el Domingo de Resurrección, apareció en el balcón de la Basílica de San Pedro para dar la bendición "Urbi et Orbi". En su discurso, abogó por la libertad religiosa y pidió un alto al fuego en Gaza.

Su última aparición pública fue en la misa de Pascuas, donde, aunque debilitado, logró transmitir su mensaje de paz y esperanza.

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