Influyen cambios metabólicos, hormonales y sociales.
Ludmila Moscato
Día de la trombosis: las diferencias entre
venosa y arterial y 10 consejos para evitar la formación de coágulos
Mantener un peso saludable es sumamente
importante para la salud. La obesidad es uno de los principales factores de
riesgo para enfermedades no transmisibles como las cardiovasculares, diabetes
tipo 2 y algunos tipos de cáncer.
Es sabido que la prevalencia de la obesidad
crece desde hace décadas a nivel mundial. En nuestro país, alcanza a uno de
cada tres adultos.
A la hora de pensar en cómo abordarla, es una
realidad que bajar de peso no resulta sencillo. El escenario preocupa más si se
tiene en cuenta que bajar de peso en la mediana edad puede ser aún más
complicado que en etapas previas de la vida.
Sin embargo, es posible. Así lo manifestó en
su presentación durante la Reunión Anual de 2023 de la Sociedad de Menopausia
en Filadelfia María Daniela Hurtado, endocrinóloga en la Clínica Mayo de
Jacksonville, Florida.
La profesional, que luego de su presentación
conversó de manera exclusiva con Clarín, explicó a este medio que tanto el
envejecimiento como la menopausia tienen características propias que de alguna
manera atentan contra mantener un peso saludable o adelgazar.
Anticiparse a esta etapa, modificar la dieta
haciendo hincapié en las porciones y en determinados macronutrientes, hacer
ejercicio aeróbico y de fuerza regularmente, y consultar con especialistas
asoman como las principales pautas a tener en cuenta. En esta entrevista,
detalla las principales recomendaciones que suele darle a sus pacientes.
María Daniela Hurtado Andrade es
endocrinóloga en la Clínica Mayo de Jacksonville, Florida. Foto gentileza
Clínica Mayo. María Daniela Hurtado Andrade es endocrinóloga en la Clínica Mayo
de Jacksonville, Florida. Foto gentileza Clínica Mayo.
—¿Es más difícil perder peso a medida que uno
envejece? ¿Por qué?
—Mientras envejecemos, especialmente después
de los 40 y hasta los 65 años, va a haber muchos cambios en nuestro
comportamiento, que generalmente van a resultar en una disminución de la
actividad física. Durante esta etapa, tenemos muchas más posibilidades de ser
menos activos, lo cual constituye un factor de riesgo para ganar peso.
La otra cuestión es que nuestra composición
corporal va a cambiar. Hay estudios que demuestran que a partir de los 30, la
masa muscular disminuye aproximadamente entre 3 y un 8% por cada década.