Gregory y su compañero, el colombiano Carlos
Yepes, de 40 años, quedaron atrapados la madrugada del domingo en las
instalaciones de Cormidom, la Corporación Minera Dominicana
Paul Marinko, al centro, presidente de la
Corporación Minera
Dominicana (Cormidom), explica ayer en conferencia los
últimos
pasos de perforación rápida y segura de 64 milímetros de diámetro
para
el suministro de productos hidratantes y alimentos al dominicano
Gregory
Alexander Pérez y el colombiano Carlos Yepes. /
ONELIO DOMINGUEZ
Onelio Domínguez
Monseñor Nouel, LD.- La vida le volvió a
sonreír a Gregory Alexander Pérez, uno de los dos mineros atrapados desde la
madrugada del domingo en la mina Cerros Maimón, en la provincia Monseñor Nouel.
El hombre, de 28 años, logró comunicarse por
primera vez con sus familiares, justo cuando comienza el proceso de trabajos
para su salida que, según previsiones de las autoridades y técnicos, podría
tomar varias semanas.
“Acabé de comer casi ahora mismo”, les dijo a
sus parientes, denotando buen ánimo, pese a las circunstancias.
Mientras, su familia, del otro lado de la
línea, le enviaba mensajes de aliento y le hacía preguntas al minero para
cerciorarse de que se estaba alimentando.
“Tienes que mantener la calma y comer, aquí
afuera hay mucha gente trabajando para sacarlos”, le dijeron.
Gregory y su compañero, el colombiano Carlos
Yepes, de 40 años, quedaron atrapados la madrugada del domingo en las
instalaciones de Cormidom, la Corporación Minera Dominicana.
Paul Marinko, presidente de Corporación
Minera Dominicana (Cormidom), explicó que se realizó una perforación rápida y
segura, de 64 milímetros de diámetro, a través de la cual les están
suministrando hidratación y alimentos a ambos colaboradores de la empresa.
Marinko indicó que están trabajando en dos
procesos simultáneos: el primero consiste en el refuerzo con estructura de
acero del túnel donde ocurrió el evento y la caída del terreno.
“Este proceso es mucho más lento que los
métodos tradicionales de minería, sin embargo, es necesario para lograr la
resistencia del túnel”, agregó Paul Marinko.
Avance en túnel
El segundo proceso es la construcción de un
túnel de unos 74 metros, con el que se avanzará a un ritmo más acelerado,
utilizando métodos de la minería tradicional.
El presidente de Cormidom manifestó que por
el momento no se puede establecer el tiempo que tardará la operación, alegando
que hay que garantizar la seguridad de los mineros y de los rescatistas.
Marinko informó que dispone de un equipo
multidisciplinario, compuesto por nutriólogos y geólogos con experiencia en geotecnia y deslizamiento de
rocas, igual que apoyo y asesoría del Ministerio de Energía y Minas, Dirección
General de Minería, Ministerio de Trabajo, socorristas del Centro de
Operaciones de Emergencia (COE), Equipo Humanitario de Rescate del Ministerio
de Defensa, equipo de rescate de Moran
Mining Group, de Canadá, y la Defensa Civil local.
En labores de rescate en el túnel trabajan 70
personas en las tres áreas involucradas en el rescate. Eso es, vías de
comunicación y las dos vías de acceso. Además hay equipo de geólogos,
geotécnicos, expertos en mina, profesionales médicos y todo el equipo de apoyo
para planificación y logística para traerlos a superficie sanos y salvos.