Por: Alexis Pichardo
SAN PEDRO DE MACORÍS.- Este joven talento que
está a mi lado, es Isaías Mateo director de la banda de música del Liceo Gastón
Fernando Deligne en San Pedro de Macorís.
Ahora
para el 201 aniversario del natalicio del patricio Francisco Sánchez Del
Rosario, compuso una canción letra y música de él titulada "ES MI
QUISQUEYA", a ritmo de merengue y fue interpretada por un coro de más de
75 voces estudiantiles, pertenecientes a los Liceos Gastón Fernando Deligne,
Profesor Alberto Byas y escuela básica Agustín Berroa.
Sin temor a equivocarme para un servidor en
mi humilde y nada pretenciosa opinión, una pieza musical, equiparable a la
canción Canto a la Patria de nuestro Juan Luis Guerra y diría que cuidado si aún
más.
Mateo ha dado grandes éxitos a nuestra
regional 05 de educación a través de la dirección de la Banda de música del
Liceo Gastón Fernando Deligne y su participación en los más importantes eventos
celebrados a nivel nacional, además de su continuó trabajo de formación de
músicos escolares y participación en las principales actividades que organiza
tanto el distrito educativo 05 - 01 de San Pedro este, en el que labora, como para la Regional.
Es parte de esos talentos con verdadera
vocación que no busca reconocimiento,
sino que asume con la responsabilidad del compromiso que siente por
servir al sistema educativo al cual se debe, involucrando a su hermosa familia
en ello, y de entrega por supuesto a la patria.
Además de felicitarlo por tan impresionante
composición musical, me gustaría que está pieza "ES MI QUISQUEYA"
pueda ser grabada a nivel de estudio bajo su dirección tanto musical como vocal
y podría ser utilizada en cualquier ámbito y servir incluso de promoción a
nivel internacional de nuestro país.
El talento de este joven no debe perderse,
cuando hemos dado cabida a tantos temas musicales en la radio y otros medios nacionales, que incitan al consumo de drogas, al sexo,
promiscuidad, violencia. La virtuosidad de este joven representa el antagonismo a tantos anti
valores aun dentro de nuestros centros educativos, puesto que se erige como una
luz y esperanza porque guía a un notable grupo de estudiantes por el sendero de
la disciplina, la responsabilidad, pero por sobre todo el temor a DIOS
