Luego de cuatro
años de negociaciones en La Habana, el gobierno de Colombia y las Farc
anunciaron este miércoles el acuerdo final de paz.
El siguiente
paso es ver si los colombianos respaldan lo pactado en un plebiscito el próximo
2 de octubre. Según las reglas, por lo menos el 13 por ciento de los ciudadanos
(un poco más de 4 millones de personas), deben votar por el Sí para que el
resultado de las negociaciones sea efectivo.
Desde hoy hasta
el 2 de octubre, el gobierno y fuerzas políticas que lo apoyan buscarán
convencer al país de los beneficios del acuerdo, mientras que los opositores,
encabezados por el expresidente Álvaro Uribe, insistirán en sus puntos débiles:
firmar el acuerdo de paz, dicen, sería capitular ante el terrorismo y avalar la
impunidad.
Aunque las más
recientes encuestas muestran que el Sí tiene una mínima ventaja sobre el No, el
país está polarizado entre el escepticismo y la esperanza. Serán semanas
intensas, en las que ambas posiciones, dos visiones para el futuro de Colombia,
tratarán de imponerse.