Clarín 7 minutos

Ezequiel Burgo

Argentina.- En 1993, Bill Clinton asumió como presidente de Estados Unidos, imponiéndose a la altísima imagen que ostentaba George Bush (padre) por dos logros internacionales de relieve: la caída de la Unión Soviética y la Guerra del Golfo. Siendo un joven gobernador de Arkansas, Clinton se impuso en la contienda electoral y para ello fue decisiva una frase famosa de su asesor de campaña, James Carville: “es la economía, estúpido”.

La economía demostró ser lo que el público quería escuchar en EE.UU., para ver cómo enfrentaba sus necesidades diarias, mientras la Reserva Federal subía la tasa de interés, y no lo que pasaba a millones de kilómetros de distancia en Moscú o Kuwait.

En la Argentina pasa algo similar de cara a la campaña presidencial 2023. Su población, cansada de los fracasos acumulados durante la última década en materia de gestión económica, ha premiado en las PASO a Javier Milei, quien muestra como principal fortaleza su discurso económico: el candidato de La Libertad Avanza es economista y sus competidores no.

Desde hoy, Juntos por el Cambio buscará revertir esto y neutralizar el discurso dolarizador de Milei con Carlos Melconian como vocero económico.

Por su parte, el Gobierno enfrenta sus propios obstáculos, porque ya no solo le resulta difícil hablar de economía, sino también hacer política económica: La Cámpora no comparte las medidas de Sergio Massa y rechaza que los gobernadores se hagan cargo del bono a los trabajadores para compensar la devaluación.

La frase de Carville sigue más vigente que nunca.

Estas son las noticias de hoy. Que tengas un buen jueves.

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EZEQUIEL BURGO