Autor Víctor Villegas-
La taza de la Tía de Carlos
Márquez, es todo un poema de carácter épico lirico que llega como anillo al
dedo ya que en la primera parte este autor plantea su convicción respecto a la
poesía y precisamente ese es mi criterio sobre la producción poética.
Lo expreso con mucha
satisfacción, en el principio del extenso poema se ha plasmado algo que yo
sostengo y es que para mí no existe el creador, el poeta no crea como no lo
hace el artista, toda vez que el objeto de su arte está fuera de él.
Para mí la poesía está
fuera de nosotros y uno lo que hace es investigarla y descubrirla en la
naturaleza, la realidad y la vida para luego a través de la palabra llevarla a
las emociones.
Considero que el poeta y el
artista son científicos, como todo aquel que investiga en la naturaleza por
Ejemplo los químicos y los físicos buscan las leves y los fenómenos que están
fuera de ellos con el objetivo de mejorar la vida y darle mayor bienestar al
hombre.
De igual forma el poeta
busca fuera de él lo que no es visible para todo el mundo ya que la poesía se
ubica en la realidad que vivimos cotidianamente y es una forma de esclavitud.
El hombre, cuando tiene que
comer, acostarse, trabajar, visitar amigos hace una rutina que si no ve más
allá lo deja atrapado en la realidad inmediata que interpreto como forma de
esclavitud.
Sin embargo, existe la otra
realidad, aquella que tiende a transformar la cultura y cambiar cosas. Es la
realidad que nosotros los escritores debemos aprender para entonces llevarla al
ser humano a través de la maravilla de la palabra de la misma manera que un
científico químico produce algo nuevo que sirve para curar enfermedades.
Ese es el producto del
científico, mientras el del poeta es el poema, que tiende a estimular las
neuronas provocando una emoción, un relajamiento que a fin de cuentas se
traduce en felicidades.
En la Taza la Tía, Carlos
Márquez se imagina la poesía fuera de él y por ello entiendo que coincide
conmigo por lo menos en cuanto a que no creamos la poesía.
Él presenta la poesía como
algo que el hombre en su estado mas animal vio con asombro y el motivo de ese
asombro es el espectáculo de la naturaleza, primer momento en que el hombre
produce su afán de descubrir y explicarse lo que pasa fuera de él, naciendo así
el mito que no es más que la explicación irracional de lo que rodea a los
seres.
En ese estadio el hombre
trata de desentrañar los misterios de la naturaleza y se convierte en el primer
científico en su estilo primitivo al tiempo que convertía el mito en arte, de
filosofía e historia.
De ahí que este asombro de
Carlos Márquez en su obra, se queda como algo que no puede explicar por su
contenido mágico y misterioso y al no poder hacerlo, recurre a consultar la
taza, algo que como todos sabemos, en este país hay gente que tiene mente
bastante fuerte y puede leerla.
La Taza de la Tía es toda
una mirada, una panorámica de la historia de los pueblos, así encontramos a los
griego, a los romanos, los indues, los chinos en fin todas aquellas culturas
que han hecho posible que la vida evolucionara hasta nuestros días.
Es una gran experiencia lo
que encontramos en este largo caminar por la historia del hombre, donde Carlos
Márquez encuentra tantas preguntas que se ha hecho el hombre sin todavía tener
la cabal contestación a los ministerios que la naturaleza se reserva.
El poema es un bellísimo
contexto donde no sólo encontramos el largo trayecto del poeta a través del
mundo, sino también el largo camino de las emociones poéticas y las emociones
líricas.
Yo creo que es un poema
maravilloso que tiene una unidad como muy pocas veces se puede detectar aquí.
Aquí hay muy buenos poetas y poemas y entiendo que la Taza de la Tía se inserta
entre los más logrados y será motivo de estudio ya que da en el clavo planteado
la necesidad de incursionar en la historia sin quedarnos en las palabras y las
puras metáforas
Al leer este poema de
Carlos Márquez , recuerdo otro magnifico poema de la literatura universal que
es Anábasis de Saint John Perse quien inicia un viaje por los mares.
No me atrevo hacer
comparaciones pero, la Taza de la Tía tiene en su intención cierta similitud
con Anábasis.
En líneas generales, la
obra podría tener detalles de observación pero en modo alguno esos detalles,
invalidan el valor total de la obra.
Yo espero que Carlos
Márquez siga trillando este camino, siga el trayecto de lo mejor del lirismo
dominicano y universal ya que esa mezcla de la épico y lo lirico es lo que más
conviene al desarrollo de nuestros pueblos. Creo que si él observa bien, podrá notar
hasta dónde la poesía por el camino de la historia y las emociones, contribuirá
con la transformación de nuestras culturas.
Ningún poeta es alto ni
autentico y brillante sino contribuye con la modernidad, el cambio de la
cultura y la transformación y el crecimiento de un pueblo. La poesía debe tener
ideas, no puede ser vacía por lo que ningún poema formado únicamente de
palabras y metáforas tiene validez ya que los hombres no vivimos aislados.
Es el momento en que hay
que ver la poesía y la literatura como una ciencia, para descubrir lo que nos
reserva la historia y la naturaleza y contribuir con el bienestar y libertad.
Estas fueron las palabras
del poeta Víctor Villegas durante la puesta en circulación del poema La Taza de
la Tía, del poeta dominicano Carlos Márquez.