En una víspera de conspiración para la lucha por la
libertad, como le denominó el padre Mario Serrano, cientos de ciudadanos, entre
ellos comunicadores, políticos, empresarios, activistas y artistas, manifestaron
su apoyo al veterano periodista Juan Bolívar Díaz, frente a la campaña de
difamación dirigida por Vinicio Castillo (Vincho) y otros.
"Adelante joven bateyero", le alentó
Serrano, mientras le invitaba a continuar su labor por la defensa de "las
causas justas" sin dejarse amedrentar por los que, agregó la novel
periodista Millizen Uribe "conspiran contra la salud de la patria",
al citar al padre de la Patria Juan Pablo Duarte.
Una sociedad "donde la única vía para el
enriquecimiento sea el trabajo y la productividad, no el latrocinio ni el
tráfico de influencia. Donde quede prohibida la miseria y la indigencia",
proclamó.
Además del coordinador de Participación Ciudadana,
Roberto Álvarez, el periodista Ramón Colombo, el presidente del Colegio
Dominicano de Periodistas y la vicerrectora de la Universidad Autónoma de Santo
Domingo, tuvo un turno en el encuentro Jesús Núñez, en representación del
sector cañero.
Explicó que la Unión de Trabajadores Cañeros de los
Bateyes "ha declarado periodista de honor en cada batey, en cada reunión y
en cada asamblea a Juan Bolívar Díaz", por creer en sus reivindicaciones y
hacerlas propias cuando pocos lo hacían.
Un documento "por el derecho a disentir" se
difundió entre los presentes, iniciando una recolecta de firmas que se
extenderá por otras vías en los próximos días.
En el mismo se planteó que la intolerancia abunda en
mayor grado cada vez, atentando contra la liberta de prensa y contra la libre
expresión. Asegura que al defender a Díaz se defiende el derecho a la voz
disidente y las ideas en el ejercicio de una ciudadanía plena.
Mientras que Díaz, sobreviviente a una bomba colocada
en su auto en el gobierno de Joaquín Balaguer por su intransigente posición,
invitó a resistir y rebelarse contra el miedo.
"Pierden su tiempo quienes pretenden el
silencio. Ya se impuso sobre el país una vez y nunca jamás fue posible",
pronunció con bríos el periodista, el profesor, el activista, el bateyero, el
director de medio, el padre, el hijo de una madre "que aún en sus 90 años
continúa mortificándose" por los peligros que acompañan el oficio.
Continuó: "Celebremos este encuentro como
renovación del compromiso de no cansarnos en el combate por una sociedad más
humana, menos desigual, más solidaria".
Una sociedad "donde la única vía para el
enriquecimiento sea el trabajo y la productividad, no el latrocinio ni el
tráfico de influencia. Donde quede prohibida la miseria y la indigencia",
proclamó.
Al agradecer la manifestación, Díaz recitó un
fragmento de "uno de sus favoritos", Mario Benedetti, que reza:
"Cantamos porque el cruel no tiene nombre/
y en cambio tiene nombre su destino, / Cantamos por el niño y porque
todo y porque algún futuro y porque el pueblo,/ cantamos porque los
sobrevivientes y nuestros muertos quieren que cantemos".