Por Holly Yan, Sam Romano
(CNN) — Cuando un funcionario del Gobierno de Trump dijo
que no cree que exista racismo sistémico en la Policía, muchos quedaron atónitos,
especialmente después de que los estudios hayan mostrado que las diferentes
razas a menudo son tratadas de manera distinta.
“No, no creo que
haya racismo sistémico”, dijo a CNN el asesor de seguridad nacional Robert
O’Brien. “Creo que el 99,9% de nuestros agentes de la ley son grandes
estadounidenses. Muchos de ellos son negros, hispanos y asiáticos”, agregó.
“No hay duda de que hay algunos policías racistas”, dijo
O’Brien. “Creo que son la minoría. Creo que son las pocas manzanas podridas, y
necesitamos erradicarlas”, opinó.
Los comentarios enervaron a quienes están de luto tras el
asesinato de George Floyd, incluidos policías.
“Por supuesto que hay” racismo sistémico, dijo el jefe de
la Policía de St. Paul, Todd Axtell. “No es solo en los departamentos de
Policía de este país. Dios mío, hay racismo sistémico en casi todo en este
país”, opinó.
Y los estudios sugieren diferencias en la forma en que la
Policía trata a las personas de distintas razas:
Los negros tienen un mayor riesgo de ser asesinados por
la Policía, a pesar de que es menos probable que representen una amenaza
objetiva para las fuerzas del orden, según una investigación realizada por el
profesor de la Universidad Northeastern Matt Miller. La investigación encontró
que los hispanos también son más propensos a ser víctimas de tiroteos
policiales.
Investigadores de Northeastern y la Universidad de
Harvard analizaron tiroteos fatales por parte de la Policía en 27 estados entre
2014 y 2015. Entre los que estaban “desarmados y parecían no mostrar una
amenaza objetiva para la Policía, casi dos tercios de las víctimas eran
hispanos o negros“, encontraron los investigadores.
Cuando se trata de delitos menores, “existe una profunda
disparidad racial en la tasa de arrestos por delitos menores para la mayoría de
los tipos de delitos, pero no todos”, según un informe de 2018 de
investigadores de la Universidad George Mason y la Universidad de Georgia.
El Fondo de Defensa Legal de la Asociación Nacional para
el Progreso de las Personas de Color (NAACP, por sus siglas en inglés) analizó
las quejas contra la Policía en North Charleston, en Carolina del Sur (donde el
exagente Michael Slager le disparó a un hombre negro desarmado, Walter Scott,
cinco veces en la espalda mientras huía de un control de tránsito). El estudio
de 2017 encontró que los residentes negros tenían más probabilidades de
presentar quejas que los residentes blancos, pero “el Departamento de Policía
de North Charleston (NCPD, por sus siglas en inglés) sostuvo las quejas
presentadas por residentes negros solo el 31% de las veces en comparación con
el sostenimiento de las quejas presentadas por residentes blancos el 50% de las
veces“, dice el estudio. “El NCPD define como ‘sostenida’ a la “alegación (que)
está respaldada por pruebas suficientes para justificar una conclusión
razonable de que la alegación es objetiva”, explica el estudio.