En
la doctrina cristiana se define el bien común como el conjunto de condiciones
de la vida social que permiten, ya sea a la colectividad como así también a sus
miembros, alcanzar la propia perfección más plena. El Bien común se logra por
medio de la justicia social, teniendo a la persona humana, como centro de todas
las actividades.
El
taller sobre formación política, estuvo dirigido por Monseñor Ramón Benito de
la Rosa y Carpio, presidente del grupo Santo Tomas Moro, y José Gómez Cerda,
secretario de esta asociación.
Monseñor
Ramon Benito de la Rosa y Carpio dijo; “El principio o el criterio del bien
común es un principio clave y fundamental en lo que es la vida humana y en lo
que son las relaciones de los seres humanos. Para la doctrina social de la
Iglesia el principio del bien común es el primero de todos los principios,
todos los bienes que existen para todos los seres humanos”.
“La
concepción es clara: Dios creó todo lo que existe para todos los seres humanos,
no para una sola persona. De ahí que el principio del bien común quiere mirar
no solamente a un individuo sino a todos los individuos, no a una persona sino
a todas las personas. Por eso, este principio del bien común es una tarea que
nos compete a todos, y de ahí que los bienes que existen sobre la tierra han de
llegar a todos los seres humanos”
José
Gómez Cerda presentó una serie de cursos online completos, libros digitales y
libros físicos relacionados con la formación política, entre esas obras explicó
sobre; La historia internacional de la política, Tomas Moro: Político y
Gobernante, Las Ideas Políticas, Arte, Filosofía y Política, El Humanismo
Integral, la Geopolítica, La invasión de Rusia a Ucrania, y otras
publicaciones, de su autoría, de contenidos políticos.
Se
realizó un dialogo entre los exponentes y los participantes, sobre temas de
interés políticos.
El
Grupo Santo Tomás Moro es un espacio de reflexión, diálogo y formación de
laicos católicos que se forman políticamente, en vida pública en la República
Dominicana, con principios, valores y éticas cristianas, para participar en
capacidad en el arte, la ciencia y la técnica de una política honesta.
“El
hombre no puede ser separado de Dios, ni la política de la moral”. Tomas Moro.
Monseñor
Ramon Benito de la Rosa y Carpio
Presidente
José
Gómez Cerda
Secretario
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