Reconocen la contribución realizada a las relaciones de República Dominicana y España.
AUDRY TRINIDAD
Santo Domingo, LD.- El empresario Manuel
Corripio Alonso y la directora general del Grupo León, María Amalia León fueron
condecorados este jueves con la Cruz de la Real Orden de Isabel la Católica
concedida por el rey de España, Felipe VI en reconocimiento a la contribución
que han realizado los empresarios a las relaciones de Republica Dominicana y
España.
El acto fue celebrado en la casa del
embajador de España, Antonio Pérez Hernández, quien resaltó que Republica
Dominicana y España mantienen unas excelentes relaciones bilaterales gracias a
la dedicación y el esfuerzo de personas como Manuel Corripio y Amalia León.
Pérez Hernández valoró de Corripio su
“importante papel en el ámbito empresarial” y “notable contribución" al
desarrollo de las relaciones culturales entre España y República Dominicana a
través de la Fundación Corripio.
El diplomático indicó que la familia Corripio
siempre han colaborado estrechamente con la Embajada de España en diferentes
actividades, resaltando el apoyo de Corripio apoyo a la publicación del libro
“España y República Dominicana. Una historia Compartida”.
“El libro pone a bien de manifiesto la
profundidad de los vínculos que nos unen, porque en el fondo ser dominicano y
ser español es el anverso y el reverso de una misma moneda, de una forma de
vivir y de pensar muy similar, además nos une el vínculo que es el del afecto”,
sostuvo el embajador.
Al ser galardonado, Manuel Corripio se
dirigió a los presentes y expresó sentirse agradecido de estar rodeado de sus
seres queridos, así como haber tenido el privilegio de nacer en este país “tan
acogedor con nuestros antecesores, los abuelos, a quienes hizo suyos desde su
llegada y el que fuera de ellos su tierra prometida, como lo sigue siendo para
nosotros”.
El empresario vivió un emotivo momento al
recordar el año 1979, y no pudo contener las lágrimas al mencionar cuando
conoció a su esposa Rafaela Martínez de Corripio en el patio del colegio
Loyola, mencionando el trayecto que han vivido con la llegada de sus cuatro
hijos y sus cinco nietos que han sido “alegría y luz a nuestras vidas”.
“Este reconocimiento solo compromete a
cultivar ese amor y cumplir con el traspaso de éste a los muy míos. Compromete
a que con nuestro esfuerzo se profundicen las raíces de esa semilla asturiana
plantada en tierra dominicana hace ya más de un siglo, en el caso de mi
familia, por nuestro abuelo Manuel”, afirmó.