El control
republicano del Senado y de la Cámara de Representantes le ayudará a sacar
adelante sus propuestas.
Donald Trump Presidente de los Estados Unidos
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El republicano Donald J. Trump ganó la carrera a la Casa Blanca y desmintió todos los pronósticos que auguraban una victoria de su rival demócrata. Su discurso de cambio fue más importante para millones de votantes que sus insultos a mexicanos, sus palabras contra los musulmanes o las acusaciones de acoso sexual que pesan contra él.
Empujado por
el apoyo de los hombres, las personas mayores y los votantes blancos sin
estudios, el candidato batió a Hillary Clinton y a la poderosa maquinaria
demócrata, que movilizó a dos presidentes y a una primera dama para evitar que
el republicano llegara al poder.
Con la
mayoría republicana en el Senado y en la Cámara de Representantes, Trump
acabará con el bloqueo legislativo del Capitolio, lo que le permitirá sacar
adelante sus propuestas y cubrir la vacante en el Supremo con un juez conservador.
Su promesa
de construir un muro en la frontera con México y de deportar a todos los
indocumentados tendrá un impacto en millones de familias. Su intención de
renegociar los acuerdos comerciales, su retórica aislacionista y su nula
experiencia de gobierno dibujan un paisaje muy incierto que hizo desplomarse al
dólar y asustó a los inversores de Wall Street.
Trump derribó
la inmensa mayoría de los sondeos, que auguraban una victoria de su rival.
Perdió Nevada y Colorado pero ganó estados en disputa como Florida, Iowa, Ohio
o Carolina del Norte y sorprendió arrebatando a Clinton varios estados del
Medio Oeste industrial.