Por Ivana Kottasová
(CNN) -- Los campos de minas en el sur de Ucrania son tan densos que los
soldados que intentan liberar el área solo pueden avanzar “árbol por árbol”,
dijo a CNN un soldado que participa en la contraofensiva de Kyiv en el sur del
país. En todos sus años de servicio, aseguró, nunca había visto tantas minas.
El soldado, que pidió ser identificado por su distintivo “Legión”, le
dijo a CNN que creía que las acciones de sus tropas fueron “bastante exitosas y
efectivas”. Sin embargo, mientras él y otros soldados ucranianos atraviesan
áreas minadas y se encuentran con defensas fuertemente fortificadas y ataques
aéreos, gran parte del mundo parece pensar que avanzan con bastante lentitud.
Los aliados occidentales de Ucrania están nerviosos por el hecho de que
el progreso de la tan esperada contraofensiva de Kyiv se mide en metros, en
lugar de kilómetros. Los aliados de Kyiv saben muy bien que Ucrania no puede
derrotar a Rusia sin su ayuda. Pero el ritmo más lento de lo esperado de la contraofensiva
significa que su apoyo podría volverse cada vez más insostenible si el
conflicto se prolonga.
Muchos de los países que están apoyando los esfuerzos de guerra de
Ucrania están luchando contra la alta inflación, el aumento de las tasas de
interés y el lento crecimiento. Sus líderes, algunos de los cuales se enfrentan
a elecciones en el próximo año y medio, deben justificar la enorme cantidad de
recursos que han invertido en Ucrania cuando sus propios votantes luchan para
llegar a fin de mes. Eso puede volverse difícil si no hay mucho éxito en el
campo de batalla para demostrarlo.
Zelensky, con CNN: llama "débil" a Putin y dice que el poder
del presidente de Rusia se está "desmoronando"
Sin embargo, por ahora, el apoyo parece inquebrantable. Varios
funcionarios ucranianos y occidentales han admitido que la contraofensiva hasta
ahora no ha logrado avances importantes, pero la mayoría se apresuró a agregar
que el lento progreso estaba justificado.
Las líneas del frente en el sur y el este de Ucrania no se han movido
mucho en los últimos meses, lo que les da a las tropas rusas mucho tiempo para
atrincherarse y prepararse para una contraofensiva.
Según una evaluación del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW,
por sus siglas en inglés), un grupo de expertos con sede en Washington, algunas
de las secciones más estratégicas de la línea del frente están protegidas por
múltiples líneas de defensa, lo que dificulta que los ucranianos avancen a través
de ellas.
El presidente del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., el general Mark
Milley, dijo que el ritmo no es sorprendente, dado que los soldados ucranianos
luchaban “por su vida”.
“Les estamos brindando toda la ayuda humanamente posible, pero al final
del día, los soldados ucranianos están atacando a través de campos minados y
trincheras”, dijo.
“Así que sí, claro, va un poco lento, pero eso es parte de la naturaleza
de la guerra”, dijo Milley en el National Press Club, el pasado viernes.
Milley enfatizó que, aunque lentamente, los ucranianos están avanzando.
“[La ofensiva] avanza de manera constante, deliberada, abriéndose camino a
través de campos minados muy difíciles... ya sabes, 500 metros por día, 1.000
metros por día, 2.000 metros por día, ese tipo de cosas”, dijo.
Si bien las fuerzas de Ucrania se abren camino a través de campos de
minas mortales en tierra, todavía carecen de superioridad aérea y están bajo
frecuentes ataques desde arriba.
"Legión", un sargento mayor de la 47ª Brigada de Ucrania que
participa en los combates en el sur, dijo que estaba claro que las fuerzas
rusas se han estado preparando para este momento durante meses.
“Sabían que esta área es donde se llevará a cabo el ataque principal,
por lo que se prepararon a fondo. Aquí tienen artillería y aviación, y tanto
cazas como helicópteros están trabajando regularmente”, dijo.
Legión le dijo a CNN que los combates en el área eran comparables a “lo
que era en Bakhmut durante la fase más álgida”.
"Acontecimientos importantes aún están por delante"
Funcionarios ucranianos han dicho en repetidas ocasiones que, si bien la
contraofensiva está en marcha, el impulso principal aún está por llegar.
La viceministra de Defensa, Hanna Maliar, dijo el mes pasado que Ucrania
estaba reteniendo algunas de sus reservas y que el “ataque principal” aún
estaba por delante.
El ISW también dijo que la información publicada por bloggers militares
rusos sobre la situación en el frente sugiere que “las fuerzas ucranianas no
están intentando actualmente el tipo de operaciones a gran escala que
resultarían en rápidos avances territoriales”.
En cambio, el Ejército ucraniano parece estar lanzando ataques más
pequeños en diferentes direcciones a lo largo de la línea del frente de casi
1.000 kilómetros de largo, tratando de agotar las reservas rusas antes de
lanzar un gran impulso.
Mientras tanto, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, dijo que
quería ser estratégico sobre a dónde se envían las tropas.
“Cada metro, cada kilómetro cuesta vidas”, dijo. “Puedes hacer algo
realmente rápido, pero el campo está minado hasta el suelo. Las personas son
nuestro tesoro. Por eso somos muy cuidadosos”.
Zelensky reconoció este lunes que la semana pasada fue difícil para las
tropas en el frente. “Pero estamos progresando. ¡Seguimos adelante, paso a
paso!”, dijo en un comunicado.
Milley instó a los observadores a ser pacientes y dijo que espera que la
contraofensiva dure hasta 10 semanas.
“Lo que había dicho era que esto tomará seis, ocho, 10 semanas. Va a ser
muy difícil. Va a ser muy largo, y va a ser muy, muy sangriento. Y nadie
debería hacerse ilusiones sobre nada de eso”, dijo.
-- Tim Lister, Mariya Knight, Julia Kesaieva y Victoria Butenko y Haley
Britzky, de CNN, contribuyeron con este reporte.