Argentina.- Desde la cuenta de X que se le atribuye a Santiago Caputo,
principal operador de Javier Milei, se descontó la llegada de Ariel Lijo a la
Corte: “Ya tiene los votos”, escribió el martes en un breve intercambio con un
ex funcionario de Mauricio Macri. El posteo sonó a un alardeo sin sustento
porque hasta ahí nada indicaba que el polémico juez tuviera realmente
garantizado, siquiera, el dictamen a favor de su pliego en la Comisión de
Acuerdos del Senado. Así, muchísimo menos podría tener los 48 votos que se necesitan
para nombrar a un ministro de la Corte.
Pero de golpe, salieron a la luz señales de que la Casa Rosada se mueve
para despejarle el camino al magistrado. Poco antes de la presentación de Lijo
en la audiencia pública del Senado, de forma inesperada, la UCR corrió al
senador Pablo Blanco -uno de los pocos que se pronunció en contra de Lijo- y lo
reemplazó por un correligionario del ala dialoguista del bloque.
La jugada acerca al oficialismo a que el pliego sume las firmas para el
dictamen en la comisión. Pero también revela que el radicalismo aportará votos
en el recinto. Para llegar a la Corte, Lijo necesita sí o sí que gran parte del
peronismo también lo apoye. El jefe de UxP, José Mayans, dijo que con él nadie
charló. En el radicalismo tampoco admitían ninguna negociación subterránea
hasta que Blanco fue eyectado.
¿Empezamos con las noticias? Ojalá tengas un muy buen jueves.